Se les empieza a notar los frutos de su trabajo en los entrenamientos.
Filipenses: Pablo Fernández (37), Carlos Franco (2), Alex García (5, 1 triple), Emilio Robles (7), Pablo Ordoñez (-) -cinco inicial- Alvaro Niño (-), Guillermo Fernández (-), Daniel Benito (-), Miguel Salgado (9), Manuel Ramos (-).
Quinto partido y el último de la primera vuelta nos llevaba a tierras bercianas para jugar contra el CDP, cantera del equipo que limita actualmente en la LEB Plata, tercera categoría en discordia de nuestro baloncesto.
Volvían las cosas a la normalidad tras la situación de la semana pasada y tanto Pablo Fernández como Emilio Robles volvían para vestirse de corto y jugar el partido con sus compañeros. La única baja con la que contaba nuestro equipo era la de Jesús Casañé en este partido.
El primer cuarto fue el más anotador hasta la fecha de los nuestros con hasta 21 puntos anotados en ese periodo. El acierto en el tiro exterior y sobre todo las buenas defensas y transiciones rápidas nos daban muchas oportunidades de anotar con facilidad, lo que provocaba que el primer cuarto cayera en favor de los visitantes (15-21).
El segundo cuarto seguiría donde lo dejaba el primero, aunque el acierto exterior visitante cayó en picado, lo que provocó parciales locales en los tramos en los que los visitantes no podían correr o no podían hacer valer su juego posicional. Hasta en 2 ocasiones en el cuarto el equipo local tuvo parciales de 6-0, lo que provocaría que se llegara al paso por vestuarios con un ajustado (32-34) favorable a Filipenses.
La segunda parte prometía un buen encuentro tras lo visto en la primera parte por ambos equipos, pero la superioridad rival y el hecho de jugar en casa pesó más que el carácter de los palentinos, que en ningún momento del encuentro perdieron la cara al partido, pero que poco a poco veían que sus rivales se iban en el marcador.
Llega de esta forma una nueva derrota que nos deja al final de la primera vuelta en la quinta posición del grupo con un balance de 1-4. Felicitar sobre todo a los jugadores, a los cuales se les empieza a notar los frutos de su trabajo en los entrenamientos, y esperemos que estas experiencias solo les sirvan para querer seguir mejorando.
El próximo fin de semana tendremos el último partido de esta fase fuera de tierras palentinas, y nos enfrentará al Colegio Leonés A, partido que esperamos no discurra por el mismo cauce que el encuentro anterior.