Filipenses, no perdió la cara al encuentro en ningún momento.

Tercer partido y primer derbi de la temporada 21-22 en la categoría infantil masculino que enfrentaba a dos equipos que habían vencido en su anterior enfrentamiento previo a este partido, Filipenses en condición de local, y CB Palencia, líderes en solitario del grupo de clasificación B.

El partido daba comienzo con un claro dominio visitante, aunque sin un juego brillante, su alta presión y su buena actividad de manos, además del poco acierto en las acciones de ataque locales, favorecía transiciones rápidas que hacían que se despegaran en el marcador con un buen parcial inicial 2-16 en los primeros 6 minutos de juego. Tras un tiempo muerto local y algunas rotaciones, la actividad defensiva de Filipenses cambió, y la dinámica del partido fue completamente opuesta, logrando dejar a los rivales con 4 puntos en los siguientes 4 minutos, con un parcial positivo 8-4 que hacía llegar al término de los primeros 10 minutos con un marcador de 10-20.

El segundo cuarto seguiría donde lo dejaba el primero, intercambio de golpes entre ambos equipos en el que la distancia del marcador ni se acrecentaba, ni disminuía. No es hasta el 6º minuto del cuarto que el CB Palencia comenzaba a abrir brecha en el marcador de la misma forma que lo hacía en el primer cuarto, siendo muy incómodos sobre la defensa del balón y con buenas transiciones que dejaban el marcador al paso por vestuarios con un engañoso 18-46, que no reflejaba lo que hasta ese momento se había visto en el partido por los dos equipos.

La reacción por parte de Filipenses debía llegar con un cambio tanto a nivel ofensivo como defensivo, para poder estar en situación de reducir la ventaja y disputar el partido en el último cuarto, pero la diferencia física entre los dos equipos (sólo dos de los jugadores que componen el equipo de Filipenses son de segundo año), provocaban otro parcial negativo (14-24) que sólo hacía incrementar la ventaja visitante hasta el 32-70 con el que se llegaba al final del tercer cuarto.

Al final un quiero y no puedo de Filipenses, que no le perdió la cara al encuentro en ningún momento pero que se vio superado ante un rival físicamente superior y que mereció ganar el partido. Felicitar a los nuestros que en ningún momento bajaron los brazos pese a la gran diferencia en el marcador, nota de ello el haber competido durante la gran mayoría de minutos en todos los cuartos del encuentro.

El próximo partido será el segundo derbi de la temporada y el segundo consecutivo en casa, en el que Filipenses se va a enfrentar al Club Deportivo Maristas, el segundo equipo palentino en discordia del grupo con su victoria frente a San Pablo Burgos esta jornada.

Filipenses: Manuel Ramos (2), Pablo Fernández (30, 1 triple), Alex García (1), Emilio Robles (-), Pablo Ordoñez (-) -cinco inicial- Álvaro Niño (-), Miguel Salgado (3), Carlos Franco (4), Jesús Casañé (-), Guillermo Fernández (-), Daniel Benito (6, 1 triple).